jueves, 30 de septiembre de 2010

Lucian Blaga (1895-1961) Tristeza Metafísica y siete poemas


Lucian Blaga; Poeta, dramaturgo y filósofo rumano, considerado uno de los grandes poetas rumanos del siglo XX y fiel representante del expresionismo. Nacido en una familia de tradición eclesiástica, Lucian fue un destacado alumno en la escuela alemana de Sebes, ciudad cercana a su pueblo. En esa ciudad conoce la vida de los campesinos y su medio ambiente, dejando una huella que luego la refleja en toda su obra.

TRISTEZA METAFÍSICA

En los puertos abiertos hacia los secretos
de las grandes aguas,
he cantado con los pescadores,
altas sombras en la orilla,
soñando en buques cargados
por el milagro ajeno.
Al lado de los obreros ceñidos con mallas oxidadas,
he lazado puentes de acero
sobre el vuelo del pájaro puro,
sobre profundos bosques,
y cada puente se arqueaba
llevándonos consigo por tierras de leyenda.
He demorado mucho entre las rocas
al lado de los viejos santos,
como las curanderas del país,
y he esperado que se abriera
una ventana de salvación
entre los poderosos espacios del anochecer.
Con todos y con todo
me retorcí por los caminos, por las orillas,
entre máquinas y las iglesias.
Al lado de fuentes sin fondo,
abrí el ojo del conocimiento.
Recé con los obreros harapientos,
soñé con los pastores de las ovejas
y esperé en los barrancos con los santos.
Ahora me doblo en la luz
y lloro bajo los tardíos restos
de la estrella bajo la cual andamos.
Me alcé las heridas en los vientos
con toda la criatura
y guardé ¡ay, ningún milagro se cumple!
No se cumple, no se cumple jamás.

Y sin embargo, con palabras sencillas,
como las nuestras,
hicieron el mundo, los fantasmas, el día y el fuego.
Con pies como los nuestros
Jesús anduvo sobre las aguas.

EL VIEJO MONJE ME DICE DESDE EL UMBRAL

Joven, tú que vas por la hierba de mi convento,
¿queda mucho aún para que se ponga el sol?
Quiero entregar mi alma
junto con las serpientes aplastadas en las madrugadas
por los palos de los pastores.
¿No me contorsioné yo también como ellas
en el polvo?
¿No me retorcí yo también como ellas bajo el sol?
Mi vida ha sido todo lo que quieras,
alguna vez fiera,
otra vez flor,
otra vez campana que riñe con el cielo.

Hoy me callo y el hueco de la tumba
suena en mis oídos como una campana de arcilla.
Espero en el umbral la frescura del fin.
¿Queda mucho aún? Ven, joven,
toma tierra en las manos
y pónmela encima como agua y vino.
Bautízame con tierra.

La sombra del mundo pasa sobre mi alma.

PARA LOS LECTORES

Allá está mi casa. Más allá es sol y el huerto con colmenas.
Vosotros pasáis por el camino, miráis por entre las rejas
y esperáis a que os hable. ¿Cómo empezar?
Creedme, creedme,
se podría hablar sobre cualquier cosa cuanto se quisiera:
sobre el destino y sobre la serpiente del bien,
sobre los arcángeles que surcan con su arado
los jardines del hombre,
sobre el cielo hacia el cual crecemos,
sobre el odio y la caída, sobre tristezas y crucificaciones
y más que nada sobre el gran correr.
Pero las palabras son las lágrimas
de los que quisieron llorar y no pudieron.
son tan amargas todas las palabras,
por esto, dejadme
pasear mudo entre vosotros,
salir a la calle con los ojos cerrados.

ORILLA DEL MAR

Viñas rojas,
viñas verdes ahogan las casas bajo salvajes tallos
poderosos, como pólipos
que apretasen en sus brazos una víctima.
El sol saliendo limpia de sangre en el mar
las lanzas con que mató rápido a la noche
como una fiera.
Yo
me quedo en la orilla -mi alma está lejos de su
casa.
Se ha perdido por un sendero sin fin y no encuentra
el camino para volver.

AUTORRETRATO

Lucian Blaga está mudo como un cisne.
En su país
la nieve del cuerpo ocupa el sitio de la palabra.
Su alma está buscando,
en muda, secular búsqueda,
la de siempre,
hasta los últimos confines.

Está buscando el agua que se traga el arco iris.
Está buscando el agua
en la cual el arco iris se traga su hermosura
y su inexistencia.

LA ESTALACTITA

El silencio es mi sabiduría
y como permanezco inmóvil y sereno,
tal un asceta de piedra,
me parece
que soy un estalactita dentro de una cueva inmensa
con el cielo por bóveda.
Lentas,
lentas,
lentas gotas de luz,
gotas de paz, caen incontenibles
del cielo
y se hacen de piedra dentro de mí.

QUIROMANCIA

A los cuarenta años, esperando aún,
andarás como hoy entre estrellas tristes y hierbas.
A los cuarenta años, ahogándote la palabra,
te perderás dentro de ti –buscando.
A lo largo de los años, un viento
te perseguirá bajo el cielo,
comerás miel negra y callarás doblado.
A los cuarenta como a una orilla llegarás,
donde siempre
esperarás que venga a ti la otra ribera,
eterno saqueo deseándote para los pájaros
del otro horizonte.
Por setenta y siete callejuelas
andarás descalzo y sin cubrirte la cabeza:
¿qué semilla no fue en desierto echada?,
¿qué luz no fue en vano cantada?

SILENCIO

Tanto silencio me rodea que me parece oír
el choque de los rayos de la luna en la ventana.

Una voz ajena despierta dentro de mi alma
y una canción canta
un ansia que no es mía.

Se dice que los antepasados muertos antes del tiempo
con la sangre aún joven en las venas,
con grandes deseos en la sangre,
con mucho sol en los deseos,
vuelven,
vuelven para vivir todavía un poco más
dentro de nosotros
la vida que dejaron de vivir.

Tanta quietud me rodea que me parece oír
el choque de los rayos de la luna en la ventana.

Ay, quién sabrá, alma mía, dentro de qué pecho
cantarás tú más allá de los siglos,
en las dulces cuerdas del silencio
en arpas de tiniebla, tus ahogados anhelos
y tu vencida alegría de la vida.
¿Quién lo sabrá, quién?

sábado, 25 de septiembre de 2010

Omar Lara (Nueva Imperial 1941); Los Buenos Días y Otros Poemas



FOTOGRAFÍA

Ese de la derecha, en cuclillas, debajo de la barbita de Lenin,
ese soy yo.
Es en una ciudad que vi y no vi,
tal vez estuve en ella, esta fotografía me inquieta,
debo averiguar hasta qué punto yo soy en esa imagen.
Anduve dando tumbos en esa ciudad.
Despertaba en la noche y me encontraba en ella,
con esfuerzo volvía a la realidad. Incluso tuve amores
con una muchacha, hasta que me confesó
ser sólo un espejismo. Desde entonces
evito salir sin un plano, ahora último repleto mis bolsillos
con pastillas de variado uso
y de vez en cuando me inclino sobre el pasto

y huelo,
porque reconozco, de veras,
el olor de las calles que conozco
y distingo debajo de la lluvia,
por el sabor del barro,
el lugar donde estoy.

MALAS PALABRAS PARA VIOLETA PARRA

No le escribo al cielo ni al infierno,
presumo no estará por esos lados
sino en algún lugar más o menos anónimo
haciendo

entre otras cosas

el amor
tejidos para el Louvre
una que otra canción de soledad o guerra.

Violeta

luego que decidió pegarse un tiro
en esa carpa de La Reina
todos cantaron cantos a su muerte
pocos cantaron cantos a su vida.
Fuera de una defensa de Parra Nicanor
escrita cuando vivía usted, Violeta,
lo demás era paja molida.

Yo conozco muy poco de su vida,
fuera de que su cara me recuerda
las campesinas lentas de mi tierra,
yo conozco muy poco de su vida.
Y no podría hablar con propiedad
de lo que desconozco. Sin embargo
ese gesto tiernísimo de apretar el gatillo
(¿como desafinar una guitarra?)
llenó de notas vivas su figura.
Y no es que crea que la solución
es andar a balazos con el mundo.
¿Pero a quién se le puede reprochar
que se canse

de pronto
que se canse?

CARPINTERÍAS*

Ciertamente
no es ésta una conversación
en el sentido práctico o rotundo
de las conversaciones.
Resulta
que estoy lleno de ventanas
y me revolotean serruchos
musicales y afirmo
con martillos cotidianos
ciertos ritos necesarios.
Resulta que navegan garlopas
en mi mente
y taladros borrachos
y compases

y metros.

Abuelo

constructor de íntimas catedrales
familiares,
qué construyes ahora
en tu existencia de maderas
pálidas,
qué construyes

dime.

Abuelo
juan

mendoza
con tu nombre plural, con
tus ventanas olorosas
a aserrín y virutas,
quiero decir

te digo
en último caso

y en primero
queremos organizar la tierra
y entregártela.

EL ENEMIGO

Es cierto que estoy prisionero
de algunas palabras precipitadas

y terribles
que proferí a propósito
de alguien. Alguien
con quien feroces nos herimos
y al que abrazaría de inmediato
si lo tuviera a mi lado

JUGADA MAESTRA

Ya ni te pido que descanses, pequeñísima
impostergable mujer mía.
Porque esta broma del amor, esta
jugada maestra de sentirnos necesarios
ha ganado terreno, nos ha solicitado sabiamente:
nos hemos vuelto locos.
Hemos resuelto que esto es el amor.
Sólo falta saber cómo lo utilizaremos
de qué buena manera para todos
antes que sea demasiado tarde.

MIRO ESTA TARDE QUE PERDÍ

Miro esta tarde que perdí
esta tarde limpia y brillante
no estoy en ella sin embargo.
Es que de pronto me llegó
su soplo antiguo, delirante.
Me vi corriendo sobre el pasto
entre las margaritas de Imperial
bajo álamos y eucaliptos.
Miro esta tarde que perdí,
robábamos frutas en las quintas
apedreábamos el aire
nos revolcábamos en el trigo.

Y era en tardes como ésta.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Jorge Ita; Ciudadano del Mundo y Otros poemas


A Jorge Ita (1970) lo conocí en una "lectura poética" en la Universidad Garcilaso Inca de la Vega en el año 2002, Lima, Perú.
Es periodista y ha obtenido diversos reconocimientos literarios tanto en su país como en el extranjero. Pertenece a la generación del 90, y es considerado por muchos como un referente de la Nueva Poesía Peruana .

CIUDADANO DEL MUNDO
A veces me sueño estar en un país lejano, utópico y brumoso,
Lejano y distinto al que habito consuetudinariamente
Viajando alrededor del mundo en un poema
Siguiendo atento arabescos con la mirada serena
El vuelo rasante de una gaviota chillona
Acariciando la blonda y bruna cabellera del viento
Con mis manos fragantes de leproso contemporáneo
Irradiando lacios y crespos paisajes y potros bellísimos
De reluciente piel como lisas piedras planas expuestas al sol
Veloces y delicados delfines bailoteando en su hábitat natural
Alegres y graciosos suspendidos en el aire sobre su cola de turrón
Grises jabones resbaladizos en el lavabo o la ducha a la hora del baño
Atestados de peces dorados, carpas rayadas y arrecifes de coral
En mares eternamente azules de otros continentes
O en los maravillosos lagos del vecino país del sur
Y pienso en lo que pasaron separados juntos epistolarmente
Milena & Kafka/Marlene & yo/Sergio & tú sin Tito
En los días con nieve en el aeropuerto de Frankfurt y Moscú
Dos gruesas y pesadas gotas de cera debieron ser tus lágrimas
Como los míos sapotes gordos dos saltando a la fuente de agua maga
Que es este papel en blanco en que mi pena te detallo lujoso
Y pienso aun ahora en ti mi hermana En Sergio y Tito
Como en los días de los campos de concentración Nazi
Pienso en el poeta que es Nelson Ramírez V-C en Anaheim-California
En Miguelángel Guzmán & Charito Aída Kanashiro
En Claire y lo que dirá en su flamante libro de poemas
Inquieta ardilla, temblorosa libélula o multicolor mariposa primaveral
Mi amiguito Takeshi y sus ojitos jalados por Yoko Ono
Porque ese que ves en fotos y recortes
De periódicos y soy yo siempre profesor
Que va nomás por ahí barbado calzando sandalias franciscanas
Pelolargo, lentes circulares de emoción, Blue Jean gastado
Es un pobre y triste remedo y rendido homenaje
En todos los idiomas del mundo a John, Vallejo, Quevedo y John
A Dante y Chaplín en su Cantinflas
Arguedas, José María, Garcilaso Inka y Machu Picchu
A Humareda, Picasso y Dalí Salvador
Lennon siempre Lennon en la cajita de resonancias
De mi loco y alborotado corazón musical juvenil
Orquestando (IMAGINE) una canción de amor por la paz en el mundo
Bajo la intermitencia mortecina de las luces sicodélicas
De la prodigiosa década de los 60s y 90s todavía
Llorándote en versos de pie quebrado hermana mía
La estridencia de mi malhadada canción Yeyé/Dadá
Guitarra eléctrica oxidada en ristre
Desafiando soñador y Quijote vientos gigantes Molinos fuertes
Lloviznas intempestivas y granizados aerolitos andinos
Poeta Adámico, Ita Gómez Corazón, Jurado peruano Ciudadano del Mundo
Encendiendo estrellas, guirnaldas, fósforos y velas
Happy birthday to you en el claro cielo de tus ojos MALVAS.

POEMA FAX
Un día de estos MARLE ya no me tendrás
Ni siquiera para hacerme sufrir
Ni siquiera para eso
De mí no tendrás ni la menor idea fija
Un día, al despertar, sin el maquillaje
Que te precede 24 horas cada día
Ya no me tendrás para siempre
El que te esperaba horas de horas
Se habrá marchado lejos
Al otro lado del mar
Y ni el eco te sabrá devolver mi voz
Qué inútiles habrán de parecerte entonces
La inoperancia del teléfono
Los mecanismos del Discado Directo Internacional
El número del Apartado Postal en que no existo
Para nada Para nadie
Tus 22 ó 33 años bien cumplidos o mal vividos
Todos los 3 de Mayo Cada 24 de Agosto
Con el agua derramada de tu pelo
Precipitándose como negra catarata
Por tu cara pintada de niña bonita
Metida en su pantaloncito Blue Jean
Bien apretado
Como en la foto que me negaste siempre
Yo me habré ido lejos
Al otro lado del mar
Y nadie sabrá que vivo impregnado
En tu alma En tu piel
Como la densa fragancia de uno de tus perfumes
Amándote/odiándote/olvidándote/recordándote
En el lunar o el portaligas de otras mujeres
Inyectándote en los ojos
Toda la efervescente embriaguez de París...

POST-SCRIPTUM
(JOHN LENNON IN MEMORIAM)
                                       a Nelson Ramírez V-C
Entonces la vida a ninguno de nosotros
Se nos ofrecía placentera;
Sin embargo
Tuve un hermoso sueño para ti
Lejos muy lejos del país de los rascacielos
Soñé para ti
Identikit de Kimeras/Azulejos de Cerca
Miguelángel en tanto enredaba poemas
Junto a Gustavo
Ahora tarde que trato de dar respuesta
(Escribiendo largamente) a tu ausencia
Tiembla mi pulso como el de un mendigo
Y se niega al acostumbrado lapicero
Porque de ayer a hoy he vivido
Como de costumbre
Una desesperante soledad sin voces.
Que John Lennon me perdone
Y me perdone Dios
Haber callado así

TOKAPUS SENSITIVO
Pablo es hoy, el sin reir compadre de siempre, en pleno Siglo XXI:
El mismo que perdió su amarillenta palidez
De tanto trabajar sin huelga De comediante
De peluquero de lo que sea en Santa Cruz-MiraFlores
Mirando la Caja Boba de su azarosa vida austera
El pobre ya no sabe cómo anda mi corazón
Sin su grata compañía de Jesús flagelado
Él ya no viene como antes puntualmente a visitarme
A conversarme de sus asuntos faltos o de los míos
En imprecisas antologías sin animadversión alguna
Viniendo desde sus más tiernos encierros hasta mí
Oliendo a cigarros Puros no fumados
Y a silencio perfumado de amapolas
Para conversarme, convencerme y conversarme otra vez
De sus impresiones Tokapus respecto a la bendita marginación
Que rigurosamente rigen innúmeras anónimas vidas S.A. como la suya
Antipáticas argollas que el humo del cigarro
Va tejiendo en espiral al infinito
En pomposos y rimbombantes ridículos
Diminutos círculos concéntricos de escasos mms. de diámetro ¡JA!
Rodeado positivamente de negativos
Arcángeles ocasionales fotolitos y permanente soledad
Siempre tímido y metido con/sin mandil beige
Exorcisando la prosa que no rige sus demonios interiores
En un cuartito rojamente iluminado a oscuras:
Benigno laboratorio infernal y radioactivo
En forma tamaño y color azul de corazón
Poeta fotógrafo o fotógrafo de la poesía en que vive sempiterno
Estúpidas agripadas narices oranges Crush respingadas!
Ya está bueno de tanta miopía y barata pirata tontería
Él ya no viene a visitarme ni a establecerse en mi alma
Ancashina con todo su negocio MADE IN Huancavelica
¡Jesús, María y José, qué descuido de su parte!
Y qué discurso tremendo de la mía Ahora
Habrá perdido entre su tartamudez y su prisa
Que lo demoran en llegar a sus famosas citas con la nada
Mi Tarjeta de Visita mojada por la lluvia negra de palabras
Que anoto afanoso cuando no encuentro a quien busco
Como aguja en un pajar tiempo A que no lo veo
Qué será de su vida ahora que imaginariamente no le palpo
A la diestra de nuestro poeta preferido Olger Orlando grandE
Qué será de la mía mañana más tarde cuando pase de moda
El Compact Disc y el sonido digital de la telefonía celular
Pobre mi amigo Pablo: olvidado se le ve más pálido
Cada que le recuerdo le hablo a solas
Como un loco extraviado en una mañana azul de primavera y poesía.

GIRASOLEANDO
Como un Vincent Van Gogh nervioso deshojando margaritas
Me quiere-no me quiere/Mequiere-Nomequiere agreste
Sudando frío chorros de luz y tinta seca
Se apresta mi corazón aclimatado a pasar Ticlio
Dejando impregnado para siempre la majestuosidad
Y el resplandor de la nieve en el paisaje
Hasta quemar con ella la niña de mis ojos
Bebiendo en mate burilado el licor de tu ausencia
Tras de tanto & tanto viajar & viajar
Trazando itinerarios caprichosos
Viento golondrino he ido contrariamente a ti
Para dar POP ART en alegres tonos pastel
La alegre luz de mi pensamiento al mundo
Sólo por verte redivivo en un Retablo ayacuchano
Con el agregado postal de que estuve en Ica
Pueblo ondulante de vinos UVAS dunas y arenas
En que Sérvulo Gutiérrez tan callando bellamente su vida pasa
Allí conocí la mágica laguna de la Huacachina
Y sus pocas palmeras centenarias enclavadas
Como un oasis en medio de un febril desierto
He allí encarnando al Diablo de la Tradición
Me vi obligado, al quitármelo, a perder el poncho!
Así conocí sin estar en Samaria a los samaritanos
Dulces celestes luceros guías que animaron mi largo peregrinaje
Haciéndome vivir esos días tan trujillanísimos
Como Pedro por su casa: corazón generoso:
Invitándome a tomar desayuno almuerzo y cena
Adivinándome u olido a lejos el hambre feroz
Cadena pesada que traía arrastrando desde Lima
Hasta estas altas y lejanas tierras de almas buenas
Después los perdí de vista por querer vivir
A mi suerte lo que antes nunca vi ni viví
Desde entonces les voy acortando a cada paso el camino
Con largos poemas de amor sin avenidas retorcidas
Tal el cabello de sus bienamadas hijas mayores
Para que nunca me puedan alcanzar ni tampoco perder
Tan distantes ellos de mí sin sus cartas crisantemas
Declaradas universalmente/universalmente declaradas
Ah, ostracismo de ostracismos arrancado adrede al tiempo
Madreperla de perezas mágicamente nacaradas
Peor es el tener que callárselo todo uno solo
Mejor salirse de la raya imaginaria de los labios para afuera
Y no callar. No callar. Ese es el punto:
Aprender a soldar la palabra a la acción
Como buen herrero de la tierra machacando
El herraje de sus herejías y yerros dulces
En este duro y pesado trajinador prisma de hierro acerado
Que sin medir bien antes mis fuerzas me impone la vida

POÉTICA DEL BON VOYAGE

I
Un día abandoné mi casa
Olvidé mi nombre y mi apellido
Mandé al diablo todo
Y me eché a recorrer el mundo
Montado en mi Pegaso
Como un paria
Retorné por mi madre padre y hermanos:
Mis amados Libros y Amigos.

II
LIMA-PARÍS-LIMA
Vuelta a ser poeta
Anacoreta feliz
Bohemio empedernido
Vagabundo azul
Cantante fotógrafo pintor
Filósofo trasnochado
O Profesor de Lengua y Literatura
En San Isidro o La Parada.

III
Luz de luces ya sin cruz
Reverberando como una potentísima
Luciérnaga en la ETERNIDAD
El buen ánimo, nunca quieto,
Como a un ánima me ladra
Versos, madre, versos padres
GLU, GLU, GLU sin desfallecer.

IV
Jeanett 90-60-90º Prado
Chiclecito que mascó mi amor
¡Adiós, GOOD BYE, Arrivederci!
Cuerpo de sirena Despampanante
Cabeza llena de aserrín
¡Hasta nunca encontrarnos
Hasta siempre vernos, CHAU!

martes, 14 de septiembre de 2010

Bernardo González Koppmann; La Moneda y 25 Poemas Breves


                      La Moneda

El cardenal en La Moneda
conversa con el dictador
el nuncio en La Moneda
conversa con el dictador
el papa en La Moneda
conversa con el dictador
pero el dictador no sabe
que a La Moneda
si no entra el pueblo
no entra Dios

Burguesita
Pensar que dentro de mi patria
siempre hay una muchacha prisionera
detrás de un parabrisas
detrás de un trajecito diseñado en Europa
detrás de un héroe
ignorando por siglos
la paz de andar a pie por estas calles

En tiempos de dictadura
En tiempos de dictadura
un beso se puede alquilar en cualquier calle
los escaparates se llenan de bestsellers
y los hombres se aman por decreto ley

Víctor
+1973
Un hombre
puede amar
auque esté
muerto 

Ola
Caballo
de agua
galopa
rumbo
al sol
sudando
peces

Vendedor de cochayuyo
Miro hacia el camino
y toda la antigüedad
viene descalza
tirando su mulita parda

Último vuelo
En la playa encuentro
el esqueleto seco de una gaviota
y lo cubro de arena
con la punta del pie…
Las nubes se hacen flores
y sólo el viento pasa
dándome el pésame

Gaviota
Cuando cruza volando una gaviota
queda un hoyo en el cielo
las rocas graznan
la espuma de la orilla se hace nido
el mar cuelga de Venus
la playa refleja roce de alas:
el viento es blanco
el sol es negro
y los botes de los pescadores
semejan enormes cáscaras de huevos

Morral
Lejos, de
un gancho
cuelgan
                                      las edades

Oficio
Antes de irme
dibujaré el perfume del rocío...
Será lo único que haga

Estatua
                       a L.
Fogata
fría

Agenda
Tacho estos días con lápiz mina
por si alguna vez decides regresar

                      Hueso
                     a Remi                         
Perro:
compartamos este hueso…
Quizá mañana
me entibies
con tu cuerpo

Atajo
Benditos sean los caminos
que no llevan a ninguna parte
porque en ellos
me encuentro contigo

Talca
Mi país
limita al norte
con el zoológico
al este con el Descabezado Grande
al oeste con González Bastías
y al sur con Valdivia
porque desde allá
mi hija
me mandó una tarjeta

Galán
Yo intenté
con sonrisas estúpidas
conquistar
una estatua

Peluche
Cuando no están
mis hijos
un oso de peluche
me lee cuentos

Niña
Hay purezas que duelen
como esta mariposa
parada en mis anteojos

                      Mosca
Te heredo mis sueños:
ser aire en este basural

Leyenda
Se va en el viento
el nombre de la aldea

Sabiduría
Perdonad a los jóvenes
que igual, igual, igual
regresan con la tarde

Wancu
                    a Juana Gueichatureo
                               Esta madera sentada
frente al tacho del atardecer
aún masculla los refranes
del que partió primero

 Nubes
Por el cielo pasan
las sombras de los ríos

Carta
                a V.
Tendido a la sombra de los sauces
me he estado toda la tarde releyendo tu carta
y medito sobre lo que me comentas
del recital
del libro
del poema ése
de nuestras voces retumbando en la sala...
Ay, yo te digo
que por ir a Santiago
se me secaron las matitas de tomate

Biblioteca Nacional
Mientras leemos a los muertos
se me olvida el nombre de los pájaros

Ulises
Quemé los mapas…
Ahora mi camino
es la tempestad




sábado, 11 de septiembre de 2010

Bernardo Chandía Fica; Selección de poemas


Bernardo Chandía Fica (Santiago, 1965-2001): Laboratorista Dental de profesión, en 1985 integró el taller literario La Jaula dirigido por Olivia Saavedra y, al año siguiente, ingresó al Gredazul en el Goethe-Institut. También participó en 1987 en el taller de Alfonso Alcalde y, dos años después, en el Espacio bajo la tutela de Osvaldo Ulloa, el cual co-dirigió durante 1990. Entre 1986 y 1988, editó de manera artesanal la revista literaria La Grieta, de la cual publicó ocho números. En 1991 fue el Coordinador General de la Primera Feria del Libro de Macul, comuna en la cual residió. Entre 1991 y 1993 formó parte del grupo de trabajo de la Comisión de Cultura de la Sociedad de Escritores de Chile, institución de la cual fue posteriormente director. Sus poemas están incluido en varias antologías. Desde 1993 fue colaborador permanente de El Siglo. Publicó los siguientes libros: “Nadie está a salvo” (1992); “Furo el poeta” (1993); “Último barrio” (1995); “Evocaciones de un dios cansado (1998); “Las azoteas del miedo (1999) y “Bitácora de los vencedores” (2000). En 1999 recibió el Premio Fundación Pablo Neruda.

Son sílabas abiertas tus palabras
A veces la ilusión espera años
para que un buen día la aprieten
como una polilla entre los dedos.

Consejos para el que viene 
Todos sabíamos que aquí
no iba a ser fácil
veríamos cadáveres en las esquinas
y oleríamos carne humana en los hospitales
bajo el concreto que soporta culpas
anidarían limosneros y ratas de larga cola
que también son alimento cuando ya nada queda.
Todos sabíamos que no iba a ser fácil
los suicidas cantando su última canción
antes de enfrentar el noticiero,
escuchar el vacío de una 38
congelar el cráneo que explota en cámara lenta.
La guerra de ellos ahora sería nuestra guerra,
había que atacar con todo,
endurecer la mirada y los brazos.
Todos sabíamos que en la ciudad no era fácil
el vómito era el camino,
el amor había que dárselo a las plantas.

Para terminar
No nos enseñaron a pedir limosna
hubo que aprenderlo
y toser con fuerza entre harapos.

Luego
sonreír para la fotografía
agradecer la pensión de gracia
y sobrevivir esperando la muerte.

Recuento
Finalmente todos
nos tragamos el agua mineral de los años
y ahora,
ustedes y yo,
nos miramos las manos
y los ojos murmurando.
Tuve la opción
de ser y sombra,
juez y parte
y no me voy a poner
a mirar
atrás ahora
si los bosques permitieron que las hojas
sirvieran para ocultarse.
No me fue bien,
porqué no decirlo,
pero no me dejé seducir
por sonrisas y fotos tristes,
desprecié las barrigas
alimentadas con mala leche
y parece que fui leal.

La poesía
era nuestra existencia,
buscar un mundo utópico
con los ojos y piel entregados
al ocio de los sentidos
y eso lo hicimos amando al mundo
amándolo a usted
que me mira de frente
en los años que nos unen
para siempre en el mismo saco.

Último Barrio
Fuimos los últimos
y debemos agradecer.

Los últimos
en jugar a la pallalla
en estirar nuestras manos
para medir la cuarta.

El sueño de Ícaro
brillaba en nuestras pupilas,
la espera de la nieve
nos hacía impacientes.

El tombo,
la pinta
y la escondida,
patadas y combos
en la pichanga.
Últimos de pandilla sana,
construimos carretones blindados,
soñamos con zapatillas de moda.

Y no debemos ilusionarnos.
Atrás nadie viene,
nadie nos sigue los pasos
excepto un leve zumbido
que se acerca y aleja,
cauteloso,
esperando.

Opus nigrum
Escribo para que se vaya el miedo
porque tengo miedo escribo
si naciera
escupiría la cara de los mismos
asesinos
y el miedo me encontraría
escribiendo
escribiendo.

Alguna vez
Alguna vez nos atreveremos
bailaré contigo apegada a mi cuerpo,
no será necesaria la música,
ni pistas sofisticadas o juegos de luces
que trastoquen las siluetas.

Estaremos solos tú y yo
y el ritmo de nuestro aliento,
quizás hasta ni siquiera estemos nosotros...
pero bailaremos.

Accidente
Hay amores que son un accidente
donde heridos y muertos
mantienen sus bocas unidas
a un catre oxidado y viejo.

Puede pasar mucho tiempo
antes que alguien se atreva a separar
los fierros retorcidos
o limpiar los sistemas rotos.

Hay amores que son sólo eso,
una tragedia más en el camino

Veterinarios
Si fuimos la generación castrada
hay que reconocer que muy mal
nos castraron.
Pudimos ser mansos como bueyes
o arremeter como toros
buenas razones tuvieron
para temernos.